31 de diciembre de 2011

Balance de Fin de Año (2011).

Salvo el olor a asado que emana de casas vecinas, el movimiento porque parientes que no vienen en todo el año aparecen por la periferia con sus autazos y su orgullo de haber podido salir de acá, y la compra masiva de bebidas alcohólicas como si fuera que el mundo se va a acabar, no parecería Año Nuevo. Se siente el olor a nuevo en el aire (bah, en realidad lo que se siente es el olor a achuras quemadas y a pollo a la parrilla).
Y ya a estas alturas lo único que queda por hacer para cerrar el año es el clásico balance de fin de año. No solía hacer esas cosas, pero en los últimos años me hice como fan de hacer una examinación a mi año.
Si tengo que describir al 2011 con algún adjetivo calificativo, creo que el que mejor se adaptaría sería "favorable". 
La verdad es que no tengo muchas cosas por las cuales quejarme. Si bien el año comenzó algo deprimente, porque estaba atravesando una depresión post-parto, ligeramente fué cambiando de tono. Pude lograr muchas cosas que deseaba, conocí personas maravillosas, afiancé amistades con otras, recobré viejos contactos y pude comprobar que ciertas decisiones que tomé sobre otros individuos eran acertadas. Comencé a salir más de mi caparazón. Me dí cuenta que no sólo soy la madre de un crío saludable y hermoso que ahora tiene 1 año y 1 mes, sino que soy mucho más, soy capaz de ser coqueta, de vestirme bien, sin perder mi escencia, que tengo voz propia y no tengo que depender de nadie para lograr mis metas. Pero siempre es bueno contar con alguien que te quiera ayudar.
Como saldo negativo, se podría marcar mi separación de N., el padre de mi hijo. Un suceso que hoy puedo decir que tuvo frutos positivos. Ambos lo necesitábamos. Pero el proceso fué doloroso. Nada mas triste que separarte de tu pareja de casi 4 años. Pero ahora quiero que tengamos una relación diferente y cordial dentro de todo, mas que nada por el nene. Él siempre será su papá y ese derecho lo podra ejercer las veces que quiera, yo jamás se lo voy a negar.
Pero mas allá de eso, no puedo evitar señalar que el 2011 fué un año muy bueno para mi. Pude crecer a diferentes niveles y me di cuenta que tenía capacidades que desconocía. Por ahí me saca que la gente siempre putee y diga "este año fué una mierda" y vos te fijás y dicen eso todos los años y yo no puedo evitar preguntar "¿qué tiene que tener tu año para que sea bueno?". Algo que voy a intentar hacer a partir de ahora es mirar las cosas desde una perspectiva mas positiva. Las pocas veces que lo hice, me dí cuenta de que funciona.
Espero que siga la buena racha.


Feliz Año Nuevo para todos.

30 de diciembre de 2011

'Things to do' 2012 version.

  • Sacar las materias de 1ro (5, no me voy a rendir con eso): Y no, las tengo que sacar, no solo por capricho, sino porque me cagan las correlatividades. Para diciembre del año que viene, las quiero a todas adentro y lo voy a conseguir.
  • Regularizar las materias a las que me anote y no abandonar ninguna: Hasta ahora, vengo abandonando por lo menos una materia de las que me anoto. No quiero que pase mas eso, ahora que tengo mas experiencia, me anotaré a un módico número de materias y las voy a cumplir a rajatabla, sin sobreexplotarme pero tampoco a vagar.
  • Leer 15 libros fuera del ámbito académico: Amo leer y me choca no tener tiempo para ello, ni capital para comprarme libros. Planeo hacerme socia de la biblioteca del Instituto el año que viende, donde hay bastantes libros interesantes. Quiero volver a retomar un viejo amor, la lectura.
  • Mirar 5 películas sin subtítulos: Ésto es más práctica para mis oídos que otra cosa. Quiero mejorar en fonética y es una buena manera de practicar. Lo hice como un trabajo práctico para una materia este año y me resultó interesante así que planeo repetirlo el año que viene.
  • Hacer que el 2do cumpleaños de mi crío sea aún mejor que el primero: El primer cumpleañitos estuvo bien pero... no deslumbró y me dí cuenta, no por la ornamentación y decoración, que estuvo a cargo de mi prima y madrina del crío, sino por la (poca) predisposición tanto de criaturas como de madres para prenderse en los juegos. Al final fué lindo pero no fué "woaaa". No quiero que vuelva a pasar eso el año próximo.
  • Mantener la regularidad en el gimnasio por 1 año: Por ahora voy 5 días a la semana, de lunes a viernes sin chistar, aproximadamente unas dos horas y no hay problema porque no tengo clases. Pero cuando estas inicien voy a tener que acomodar mis horarios para ir. Pero no quiero faltar ni un día, realmente me gusta ir al gimnasio.
  • Llegar a mi peso ideal (50 kg). Peso actual: 61 kg: No estoy muy segura de cuanto sea lo ideal a perder en un año exactamente. Puse 10 kilos porque es lo que necesito para llegar a mi peso ideal, que es de aproximadamente 50 kilos. Si puedo perder más, o si puedo perder en menos tiempo, bienvenido sea.
  • Poder realizar un buen disfraz para Halloween: Ésto es algo que me lo debo hace tiempo. Y ya tengo el disfraz en mente y todo. Necesito tiempo y ahorrar plata para materializarlo. Ésto mas que propósito es para darme un gustito personal.
  • Ir al cine 7 veces: Es impresionante lo poco que voy al cine. Y a pesar que hay pocas pelis que valen la pena, hay un par que me quedé con las ganas de ir.
  • Poguear en un buen recital: Desde que estaba embarazada no voy a ningún recital. El año pasado menos, había algo que no me atraía. Pero me volvieron las ganas de poguear. Va más allá de mi. Así que si se da un recital que valga la pena en esta ciudad carachenta preciosa (o al rededores), voy sin dudarlo.
Bueno, esas son las metas. Son bastante concretas, ¿no? Y si bien hay un par o 3 que son a largo plazo, el resto son más fáciles de completar a un plazo no mayor a 5 o 6 meses. Vamos a ver que tal me va. No son propósitos muy ambiciosos, sino lo que necesito para éste momento de mi vida. Y me siento bien con ello. Y me voy a hacer abdominales. Na, mentira.

29 de diciembre de 2011

Lista de propósitos 2011.

El 26 de diciembre del año pasado, hice esta ligera lista de cosas por hacer. Mis propósitos a lograr para éste 2011. Ya estamos a 2 días de cerrar el año y a menos que sea Flash, que no lo soy, por cierto, no creo cumplir lo que falta. Pero ya tendré tiempo de explayarme, vamos al saldo telefónico que me queda de la lista:
  • Sacar todas las materias de 1er año que me quedan (son 5 xD): Aunque pensé que podía lograrlo, no pude. Pero fué un año académico la verdad muy bueno dentro de todo. Cursé 8 materias (abandoné una osino hubieran sido 9), 5 anuales y el resto cuatrimestrales. Fué un año particularmente duro porque hubo materias que tuve que hacer a la tarde, sumándole que comencé Italiano, había veces que me pasaba todo el día metida en el Instituto. Pero ¡dió sus frutos! Regularicé 7 de las 8 materias que cursé. Y aunque no haya podido sacarlas, me pone contenta el echo de haber regularizado. Ya tendré tiempo para sacarlas.    
  • Conseguir algún trabajo (por lo menos de medio tiempo): Me parecía importante encontrar laburo, pero luego del año agitado que pasé, no me pudo importar menos. La verdad que ahora, me importa más recibirme... ya tendré tiempo de laburar después. Pero si sale algo, bienvenido sea.
  • Aprender a mejorar como mamá: Sí hay algo que aprendí con respecto a este punto es que la maternidad es, más que nada, un proceso. Siempre hay algo que mejorar, siempre hay algo que aprender. Fué muy naif de mi parte emitir esto como propósito, cuando en todo momento debería de formar parte de mi. Aunque si, aprendí bastantes cosas este año. Antes no sabía como cambiar pañales, ahora sé eso y a cocinarle la comidita o darle un baño, cambiarlo, vestirlo, bancarlo, que hacer cuando se lastima. Es cierto que adquirí bastantes conocimientos en el área materna. Pero aún queda un largo camino por recorrer.
  • Hacer cosplay de: MinMay, el team Ichigo 100% y quizás Ranma 1/2: Nada que ver. Cero tiempo. La verdad que este año casi que nisiquiera tuve tiempo de ir a las convenciones. Ojalá el año que viene si pueda.
  • Terminar el cuento que comencé en Navidad y publicarlo acá: Hice 2 capítulos y los publiqué en el blog anterior pero me faltó un capítulo para terminar y quedó en el olvido. Para ser sincera, no me gustó ese cuento. Es como que le falta consistencia y por eso no lo continué. 
  • Hacer debutar a Alan como cosplayer:
  • ¡Mario, Mario!
  • Ser más comprensiva y menos egoísta con Niger (mi (ex-)novio): Yo estoy convencida de que, por más que hayamos terminado, lo hicimos por las razones correctas. Y esas razones están relacionadas con las del propósito. Yo pude comprender y entender que somos 2 personas diferentes y necesitamos nuestro respectivo espacio. Si me hubiera comportado de forma egoísta, hubiera querido continuar con él, aún sabiendo que la relación no daba para más. Así que creo que, en una manera retorcida, esto lo pudimos cumplir.
  • Intentar tener una relación más llevadera con mis padres: Esto es algo de lo que estoy particularmente orgullosa. Me dí cuenta de que no es tan difícil si las dos partes se comprometen y están dispuestas a hacer un esfuerzo por comprender a la otra. Hoy estoy en condiciones de afirmar que mis viejos y yo, más alla de los choques ocasionales que puede haber (como en todo familia) pudimos construir una relación sana. Y espero poder mantenerla.
  • Dejar de ser tan haragana: Mentiría si pusiera que esto lo cumplí. Siempre habrá haraganería en mi ser, está incorporado. Obvio, cuando hay cosas que hacer las hago. Pero es una característica que no puedo negar. Aún así ahora estoy mucho más activa de lo que estaba el año pasado.
  • Aprender a cocinar (un guiso aunque sea): Definitivamente, la cocina no es lo mio. Espero poder hacer algún cursito en algún momento. Más allá de algunas comiditas del nene que no son la gran cosa tampoco (purecito de zapallo, arrocito, bifecito) no le encuentro la vuelta a la cocina. Voy a ver si me pongo las pilas este año que comienza. Con decirles que la única vez que cociné para mi fué un huevo frito y perdí 2 huevos en el intento por colocarlos en la sartén con aceite... un desastre.
  • No dejar abandonado éste blog (el anterior),al contrario, mejorarlo más): Bueno, al final medio que lo abandoné (cuak) pero todo el año, mi viejo blog fué un fiel compañero y yo considero que también lo fuí de él. Siempre intenté mejorarlo, desde la calidad literaria (Borges, muérete de envidia) hasta el diseño. Y siempre busqué cosas para innovar. Así que el viejo blog siempre estará en mi. Jamás lo dejé abandonado, todos los meses o seamanas escribí ALGO aunque sea, así que bueno. A ver como me va con éste nuevo emprendimiento.
  • Comenzar algúna actividad física: ¡Al fin, comencé el gym! Esta e sotra cosa que me pone particularmente contenta. Comencé el lunes y planeo ir todos los días, por ahora durante hora y media para aflojar los musculos. ¡Estoy contentísima! lol.
  • Integrar TODO lo que forma parte de mi vida: mis gustos, mis responsabilidades, los momentos de ocio: Ésto es algo súper abstracto. Creo que entendí que no se puede mezclar todo. Hay momentos para cada cosa. Hay amigos con los cuales compartir ciertas situaciones y otros que son mejor guardarlos para otras. Hay momentos que te tocan que no los podes cambiar y hay otros que sí. Supongo que lo importante es saber diferenciar, teniendo en cuenta lo mejor para uno. Hay personas y situaciones de las que elegí alejarme este año, porque entendí que no me estaban haciendo bien. Y después de un año lejos de eso, pude ver las cosas de otra forma. Y ahora siento que puedo retomar lo que dejé de lado.
N° de propósitos: 13.
Cumplidos: 6.

Ahora que salí de eso, me voy a hacer una autocrítica: creo que el problema fundamental de mis propósitos a lograr es que se iban por 2 extremos, por un lado tenía cosas muy concretas y por el otro, cosas muy abstractas y me culpo a mi por eso. La manera de redactar en esta clase de cosas es clave y en algunos casos me mandé cualquiera. Pero aún así pude pilotearla y algo salió (?).
Con la lista de propósitos del año que viene intentaré que no pase.
Otra cosa que noté es que la mayoría eran propósitos a lograr en el muy largo plazo. Algunos tenía que esperar y reflexionar hasta este momento, hasta fin de año, para ver si los cumplí. Y eso no está bueno, porque sentís que no estás avanzando. A mi me pasó que era Julio y miraba la lista y pensaba "Pucha que ya estamos a mitad de año y pueda hacer una sola cosa". Y la verdad que eso no te motiva a seguir trabajando para lograr el resto. Para el 2012 intentaré que mis propósitos no sean tan graduales y hacerlos más concretos aún.
Pero como saldo positivo, la verdad que me gustó. Siempre miraba lo de las listas de cosas para hacer en un año en series y pelis yankis pero nunca pensé en hacer una para mi. La verdad que es algo re interesante mirar atrás y ver si cumpliste con lo que deseabas. Lo voy a volver a repetir, mañana voy a publicar la lista del 2012. 
Copense y haganlo ustedes también, lectores. No se van a arrepentir. Cambio y fuera.

28 de diciembre de 2011

Caracterísitcas de una buena periférica.

¿Y porqué no es malo ser una periférica? Ante esa duda, puedo encontrar 3 razones fundamentales:

N°1- Una chica periférica es una piba de barrio: Las pibas de barrio tienen un nosequé especial que las hace irresistibles. Claro, no sabremos lo que es tener una cartera Louis Vutton o zapatos de Ricky Sarkany (¿así se escribe?) pero tenemos algo más importante: la chispa. Esa chispa que tenés por vivir en un barrio no te la puede sacar nadie. Es inherente a vos, ya viene con el nacimiento y es difícil que se te despegue. Es una chispa que te hace ser auténtica, aún con tus propias caracterísitcas. Y eso va desde la personalidad al look ( qué de eso hablaré más adelante).

N°2- Una chica periférica no se anda con chamuyos: Nosotros vamos de frente, papá. Si tenés algún probema, acá mismo lo solucionamos. Nada de caretearla o de fingir que te caigo bien, o nos queremos, o nos cagamos a ñapis. El lenguaje periférico también es quisquilloso. Cada barrio tiene sus propios códigos y si una quiere sobrevivir, tenés que adaptarte. Así como también cada periferia tiene su propio ritmo de vida, no hay chance de zafarle a eso. La vida en la periferia puede llegar a ser dura, pero acá entra en juego la chispa de la que hablé antes. 

N°3- Una chica periférica es muy adaptable: si nos sacan del encuadre, no nos hace nada, mantenemos la frente alta y seguimos pa' delante. Capaz tengamos que atravezar muchas situaciones o por ahí, nos muevan de nuestro eje. Pero eso no nos hace nada. Somos capaces de resistir a cualquier situación, sea agradable o no agradable. Pero no todos pueden decir lo mismo. A mi me tomó mucho tiempo poder lograr esto. Pero en general, se puede.

Los encantos de vivir en un barrio alejado del centro son varios, pero quería resaltar los más relevantes. Hay que destacar que hay 2 clases de personas: los que se sienten orgullosos de ser periféricos y los que no. Yo, debo confesarlo, formé parte del 2do grupo mucho tiempo. Pero jamás renegué de mi posición de periférica. Jamás. Y cuando me tocó partir de mi barrio, sufrí mucho. Sufrí como condenada. Pero hay algo que te ata a tu lugar. Yo no pude pasar de un año lejos de mi periferia. Y tuve que volver. 


Y la verdad, no me arrepiento.

27 de diciembre de 2011

Espacio que rodea un núcleo cualquiera.

Hace un mes, cuando estaba en pleno preparativo de exámenes y demases yerbas, entre mis pensamientos nadando en un mar de planificación didáctica, la fonética inglesa y un buen helado de chocolate granizado, a mi vieja se le ocurre poner la tele. Mi crio de un año la perseguía agarrándola de las rodillas. Ella decidió sentarse y mirar el pequeño aparato que gobierna la vida de los adultos que no tienen ganas de aprender a encender una computadora. En la tele estaba Moria, no voy a decir su apellido porque todos sabemos de quién estamos hablando, ¿no? y el que no lo sabe vaya y prenda Infama de 17:00 a 19:00, es una orden.
A Moria me da gracia oirla porque todos le chupan las medias en los programas de TV. Conductores, wannabes de vedettes, rubias oxigenadas. Pero a ella no le importa. O capaz le importa y por eso mantiene la personalidad avasallante. Como sea, en una de sus eternas peleas, se le escuchó largar la siguiente palabrita: "periféricas". A modo de insulto, claro.
Yo me quedé pensando, después de cagarme de risa, lo confieso. Me pareció un insulto raro. "Periférica", ¿A qué se referirá? Si bien el significado inmediato era obvio, decidí consultar con la RAE (mirá lo que causa una simple palabrita que escuché de la TV) y me encontré con lo siguiente:

periférico, ca.
1. adj. Perteneciente o relativo a la periferia.

periferia.
(Del lat. peripherĭa, y este del gr. περιφέρεια).
1. f. Contorno de un círculo, circunferencia.
2. f. Término o contorno de una figura curvilínea.
3. f. Espacio que rodea un núcleo cualquiera.

Sí, esa masomenos lo que había imaginado. Pero esta pequeña frase me quedó en la mente: Espacio que rodea un núcleo cualquiera. Rodea un núcleo cualquiera. Entonces el insulto de Moria quedaba medio en pelotas, de última, el núcleo rodeado por una periferia tampoco debe ser cualquier cosa.
Luego me quedé pensando que, de echo, yo también me volví una periférica. Vivo en una periferia. Así lo hice toda mi vida. Hasta que quedé embarazada y me fuí a vivir a las grandes luces del centro, con el padre de mi hijo. Pero esa historia terminó y volví a la casa de mis padres. En la periferia de la ciudad. Entonces eso me convierte en una periférica. Pero a diferencia de la señora Casán, yo no creo que vivir en la periferia y por ende, ser una periférica sea algo malo. 
Y así es como la Periférica llegó a Blogger. 

26 de diciembre de 2011

Así que así estamos.

Es un día agradable. Miro por la ventana y no hay nada más que sol. A lo lejos se escucha el ladrido de Felipe, mi perro, desde el garage. Estoy sola en esta casa y se me ocurrió que sería lindo comenzar a echar esta iniciativa de una vez por todas. Lo pensé durante un mes. No me animaba a dar el "primer paso", que en realidad dicen los que saben, que es el que más cuesta.

Nosé si sea para mejor o para peor o para qué. Nosé si cambie algo en mi vida, más allá de que siempre hay algo distinto al despertar. Lo que sé es que lo necesitaba, necesitaba despejarme, pensar, sentir que mi cerebro no es una pasa de uva chiquitita dentro de mi cabeza, o que es una piedra que me pesa dentro del cráneo. Quería dejarme llevar y es lo que estoy haciendo.

Así que, ante ustedes, se encuentra este nuevo pequeño gran espacio. Todavía no está terminado, como podrán observar le faltan muchos detalles. Pero la idea básica está. Ya iré adelantando y desarrollándo más en los próximos días.

Pero quería que se dieran una idea del cambio.

Así que eso. Bienvenidos.